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Tratamiento Integral de la Obesidad

Tratamiento | Obesidad severa | Obesidad mórbida | Semaglutida

La Obesidad es el quinto factor de riesgo de mortalidad en el mundo y es entendida como el exceso de grasa corporal de una persona, hasta el punto que podría poner en riesgo su salud tanto física y mental. Se considera que una persona tiene sobrepeso ante un IMC (Índice de Masa Corporal) de 25, y de obesidad ante un IMC superior a 30 (kg/m2). En México, la obesidad representa un desafío significativo de salud pública tanto en adultos como en niños. En 2022, la prevalencia de obesidad en adultos era del 36.9%, 32.3% de los hombres y al 41.0% de las mujeres. En cuanto a la población infantil, el 37.3% de los niños de 5 a 11 años presentaron sobrepeso u obesidad, mientras que, en adolescentes de 12 a 19 años, la prevalencia de sobrepeso y obesidad alcanzó el 41.1%. México está entre los países con mayores índices de obesidad a nivel mundial.

El tratamiento de la obesidad no debe limitarse únicamente a la pérdida de peso, sino que requiere una intervención multidisciplinaria que contemple los distintos factores que influyen en su origen y mantenimiento. Desde el enfoque biológico, se consideran aspectos como el metabolismo, la genética, el funcionamiento hormonal y la respuesta del cuerpo a los tratamientos médicos, incluyendo la posible necesidad de fármacos específicos o cirugía bariátrica. El componente psicológico aborda los hábitos de alimentación, la relación emocional con la comida, la autoestima, la presencia de trastornos del estado de ánimo como ansiedad o depresión, así como posibles trastornos de la conducta alimentaria que dificultan el cambio sostenido de hábitos. Finalmente, el aspecto social implica identificar el contexto en el que la persona vive: su entorno familiar, laboral, cultural y económico, que muchas veces favorece estilos de vida poco saludables, refuerza estigmas o dificulta el acceso a recursos terapéuticos.

Un enfoque integral permite diseñar un plan de tratamiento personalizado, que no solo promueva la pérdida de peso de forma segura, sino que también mejore el bienestar general del paciente, aumente su calidad de vida y reduzca el riesgo de recaídas.

¿Por qué es tan importante el Tratamiento de la Obesidad?

La obesidad es una enfermedad compleja y no es solo un problema estético. La obesidad es un problema médico que aumenta el riesgo de otras enfermedades y problemas de salud. El sobrepeso es un exceso de grasa pero en menor grado, como la antesala de la obesidad. Así pues, más allá de lo puramente estético, el sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de numerosos problemas de salud, como son:

  • Enfermedades cardiovasculares: cardiopatías, accidentes cerebrovasculares
  • Hipertensión arterial (presión arterial alta)
  • Diabetes
  • Artrosis
  • Cáncer (de endometrio, mama, ovario, próstata, hígado, vesícula biliar, riñón y colon)
  • Síndrome de apnea obstructiva del sueño
  • Hígado graso (esteatosis hepática)
  • Hipercolesterolemia
  • Depresión
  • Ansiedad

Síntomas de Obesidad

  • Presentas sobrepeso u obesidad
  • El exceso de peso te limita en movilidad, y te sientes más cansado/a
  • Te cuesta mucho esfuerzo realizar algo de deporte
  • Puedes tener el sueño alterado
  • Tiene repercusiones físicas, como dolores de espalda y aparición de artrosis en las caderas, rodillas y tobillos
  • Has intentado perder peso con dietas pero no has tenido éxito
  • Ante emociones negativas utilizas la comida para aliviarte
  • Te cuesta controlar la cantidad de la comida que ingieres
  • Has comido a escondidas
  • Sientes frustración y tienes sentimientos de culpa
  • Te cuesta tener sensación de saciedad
  • Si tienes comida hipercalórica cerca, te es muy difícil resistirte a cogerla

Tratamiento de la Obesidad Severa y la Obesidad Mórbida

Se considera que una obesidad es severa (obesidad de grado II) ante un IMC superior a 35, y es mórbida o extrema (obesidad de grado III) ante un IMC superior a 40.

En el caso de la obesidad Mórbida implica una condición tan grave que interfiere con la vida diaria y aumenta significativamente el riesgo de muerte. La obesidad mórbida no solo representa un problema médico, sino también un importante reto en el ámbito de la salud mental. Se trata de una enfermedad crónica y multifactorial que impacta de manera significativa en la calidad de vida, limitando oportunidades sociales, laborales y económicas, y aumentando la carga de sufrimiento psicológico. Su asociación con trastornos como la depresión, la ansiedad y los trastornos de la conducta alimentaria es bien reconocida.

En este contexto, el papel del psiquiatra es fundamental, especialmente en pacientes que buscan tratamiento quirúrgico como la cirugía bariátrica. El abordaje psiquiátrico permite valorar la capacidad de decisión del paciente, detectar posibles contraindicaciones psicológicas, tratar comorbilidades mentales y, cuando es necesario, incorporar psicofármacos que favorezcan la adherencia al tratamiento y el éxito terapéutico a largo plazo.

Tratamiento de la Obesidad con Fármacos para Diabetes tipo 2

Los métodos convencionales (dieta y ejercicio) a menudo fracasan en estos casos. Hasta hace poco, la cirugía bariátrica era la única alternativa realista para pacientes que no lograban disminuir su peso de forma significativa y saludable a pesar de múltiples intentos de modificar sus hábitos de vida, con la consecuente frustración y malestar asociados.

En los últimos tiempos se han desarrollado fármacos, los llamados análogos de la GLP-1, que inicialmente fueron comercializados para el tratamiento de la diabetes tipo 2, y que se descubrió que también producían un efecto saciante o reducción de apetito, lo cual a menudo se asociaba con una pérdida de peso de los pacientes. A partir de ahí, se hicieron estudios específicos para averiguar si estos fármacos inyectables también servían para ayudar a las personas con obesidad a perder peso, aunque no fueran diabéticos, de forma segura.

Los resultados han sido positivos y hoy en día se han popularizado el uso de medicamentos como Ozempic y Rybelsus para el tratamiento de la obesidad debido a sus efectos secundarios no graves. Estos medicamentos son distribuidos en México por el laboratorio Novo Nordisk, y están indicados para diabetes tipo 2 y en algunos casos para pérdida de peso.

Contienen el mismo principio activo: semaglutida, pero se diferencian en la forma de administración, la frecuencia y algunos aspectos farmacocinéticos. Ozempic (semaglutida inyectable) está disponible únicamente en forma de inyección subcutánea (pluma precargada) para ser usada semanalmente y no existe presentación en pastillas. Rybelsus (semaglutida oral) está disponible en pastillas para ser administrado vía oral en comprimidos diarios.

Ambos están aprobados por COFEPRIS y disponibles en farmacias bajo prescripción médica.